sábado, 14 de marzo de 2009

Huelgas y Protestas

Exigir a las autoridades, reclamar promesas incumplidas, hacer notar la voz de un pueblo, son todos derechos que tenemos como ciudadanos de un país. Es importante dejar saber a nuestros dirigentes, que no somos una masa pasiva que simplemente se deja llevar.
Pero donde está el límite entre los derechos del ciudadano y el libertinaje y anarquía. A lo largo de los años he visto como cada cierto tiempo, el gobierno de turno, tiene que lidiar con una temporada de huelgas y protestas, muchas de ellas con razones justificadas, pero otras simplemente innecesarias. Y lo peor de todo, es ver como personas se aprovechan de la ignorancia y la necesidad de algunas personas para hacer que protagonicen enfrentamientos con la policía y siembren el desorden en las calles de nuestra nación.
Es muy peligroso cuando un pueblo pierde el respeto a la autoridad y a la ley. No me malinterpreten, ser capaz de levantarse contra un régimen opresor y dictatorial es algo admirable; pero desafiar la autoridad e ir en contra de la ley, bajo el disfraz de exigir derechos es inaceptable.
Para poder exigir tenemos que cumplir primero.

1 comentario:

Mariposa dijo...

Marcos,
Entiendo perfectamente tu punto de vista, aqui utilizamos las huelgas como una manera de chantaje...Para pedir cosas, no tan justificadas...
Pero tambien entiendo que para conseguir lo más minimo en un gobierno tan despota, a veces tenemos que bajarnos de los 'high horses' (como dicen los gringos) y ensuciarnos un poco las manos. Comprendo que las actuales huelgas, no sirvan a un bien comun (el pueblo), sino a un gremio.
Lamentablemente en nuestro pais, cuando se hace un llamado a la huelga, se traduce como un llamado a la violencia, al saqueo de inocentes, a vandalismo o simplemente a tomar otro dia feriado. Es una pena que las protetas no se tomen en serio, tanto de los que la organizan, como de aquellos a que van dirigidos.